Los riesgos psicosociales se definen por su percepción: no pueden ser evaluados sin que cada quien informe de su vivencia, de cómo siente una situación de trabajo.
Podemos clasificar estos riesgos según se asocien a:
La organización del trabajo (Karasek et al.)
• Carga de trabajo, presión de tiempos
• Control sobre el trabajo: Aplicación de capacidades, falta de autonomía, carencia de participación
• Falta de Apoyo social: jerárquico, entre compañeras/os
• Compensaciones (Siegrist et al.)
- Posibilidades de Promoción
- Programación del trabajo
- Definición de funciones
- Disposición de medios necesarios para la realización de las tareas
- Salario
- Estabilidad en el empleo…
Las relaciones interpersonales
• Violencia en el trabajo
- Acoso moral
- Acoso sexual y por razón de sexo
- Agresiones (internas y externas)
- Maltrato
- Discriminación por motivos culturales, de origen geográfico, sexo, edad, opción sexual…
• Conflicto prolongado
¡¡A recordar!!
La participación de las y los trabajadores y sus representantes en cada una de las fases del ciclo de gestión de cualquier riesgo adquiere si cabe una mayor importancia respecto a los riesgos psicosociales al tener estos riesgos un componente subjetivo, colectivo o individual, insustituible.