Antes de proceder a la evaluación deberán centrarse los esfuerzos en la eliminación de los peligros identificados anteriormente o en la ejecución de medidas preventivas para reducir los riesgos al máximo ya que son los verdaderos objetivos. Nuestra actuación siempre intentará ir más allá y se centrará también en no crear nuevos peligros y en prevenir y reducir los efectos no deseados.
Debe contemplarse la posibilidad de sustituir o modificar el proceso, los equipos o el método de trabajo para eliminar la posible exposición.
Se reducirá el riesgo de exposición al nivel más bajo mediante buenas prácticas de trabajo y las medidas de protección tanto colectiva como individual.
Mantenimiento periódico preventivo de instalaciones y equipos.